Dentro de los indicadores con mayor logro se encuentran, el ODS 1 de fin de la pobreza y el ODS 13 de acción por el clima. Ambos ODS tienen un cumplimiento mayor al 70% en promedio en la región. En el primer caso se evidencia que a pesar de que la región vio un aumento de los niveles de pobreza durante el 2020, como resultado de la pandemia por Covid19, en promedio la región ha logrado un avance importante en la reducción del porcentaje de personas que viven en pobreza por ingreso, utilizando las líneas de pobreza extrema de 1.9 USD por día o de 3.5 USD por día. En el caso del ODS 13, se resalta que la producción de emisiones de C02 en los países de la región es relativamente bajo en comparación con otros países y regiones del mundo, sin embargo, la región es una de las más afectadas y vulnerables al cambio climático, con un número de fenómenos naturales asociados a cambios en el clima que se presentan anualmente que va en aumento. Otro hallazgo importante del Índice ODS es que la tendencia en el avance en el cumplimiento de los ODS es bastante baja, con todos los países presentando indicadores con rezagos importantes y con tendencias decrecientes. En otras palabras, si los países continúan con la tendencia actual, pocos serán los objetivos y metas cumplidos. Esto resalta la necesidad de contar con una estrategia que permita cumplir con la Agenda 2030, y más importante aún, implementar políticas sostenibles en donde se respeten los límites del planeta, se promueva el desarrollo y bienestar social de todas las poblaciones, incluyendo los grupos usualmente dejados atrás como son las mujeres, población indígena, población con discapacidad, migrantes y de minorías étnicas.
Un análisis detallado de los cambios observados durante el 2020 y como la pandemia por COVID19 afectó el avance de los ODS, resaltó que, en la esfera económica, el crecimiento de la región (ODS 8.1) se vio afectado de manera negativa, en todos los países de la región, excepto Guyana y Republica Dominicana, con tasas de crecimiento de sus Producto Interno Bruto negativo. Adicionalmente, la región se caracteriza por altos niveles de informalidad e inestabilidad laboral, lo cual fue uno de los factores que causó que el efecto económico y social de la pandemia fuera mucho más grande que en otras regiones del mundo. La región también se caracteriza por presentar altos niveles de desigualdad económica y de oportunidades, con una distribución desigual de recursos entre e intra-países. La pandemia por Covid-19 generó un aumento en los niveles de desigualdad, los cuales aún antes de la pandemia ya venían aumentando sumado a que la reducción de la desigualdad se había visto estancada desde el 2017. Lo cual revela, que aún sin la pandemia, el cumplimiento del ODS 10 de reducción de las desigualdades para los países de América Latina y el Caribe ya presentaba problemas.
En la esfera social se resalta que la región enfrenta grandes retos en el cumplimiento del ODS 3 de salud y bienestar, en el cual se evidencia un aumento de la mortalidad materna e infantil durante la pandemia. Estas tasas en algunos países no han podido regresar a los niveles prepandemia y revelando que existen problemas estructurales de acceso a servicios de salud para mujeres durante el embarazo. Adicionalmente, la región se ha caracterizado por una alta tasa de cobertura de vacunación para menores de 5 años, sin embargo, desde el 2016 se vio una reducción en la tasa de vacunación. Fenómeno que fue exacerbado por la pandemia por Covid-19 y es preocupante dado que la vacunación es uno de los principales mecanismos para prevenir la mortalidad infantil y de menores de 5 años y la existencia de patologías prevenibles en niños y niñas. Con respecto a la educación (ODS 4) se evidencia que la región enfrentó la pandemia por Covid19 con una baja cobertura de internet en los colegios, con por ejemplo países como Paraguay con menos del 10% de los colegios reportando tener acceso a internet. Adicionalmente, aunque la tasa de matrícula no se disminuyó durante el 2020 y 2021, no se conoce a cabalidad cual fue el efecto de la educación virtual en el aprendizaje que niños, niñas y adolescentes tuvieron durante este periodo. Otro ODS a resaltar es el ODS 5 de equidad de género, en donde se subraya la falta de datos que permitan el monitoreo y análisis del avance o retroceso en el cumplimiento de sus indicadores. En aquellos indicadores en donde se cuenta con datos, se evidencia que las mujeres y niñas son aquellas que enfrentan mayores barreras de acceso a educación, empleo y oportunidades, con una carga de cuidado y de trabajo no remunerado, el cual no ha sido reconocido en muchos de los países como una problemática que debe ser solucionada.
En la esfera ambiental, América Latina y el Caribe es la región más biodiversa del planeta, sin embargo, enfrenta grandes retos en el cumplimiento de los ODS relacionados con el medio ambiente, como son el ODS 13 de acción por el clima, ODS 14 de vida submarina y el ODS 15 de vida de ecosistemas terrestres. En el caso de acceso a fuentes de aguas limpia (ODS 6), la región es una de las regiones del mundo con mayor número de fuentes hídricas, sin embargo, estás han disminuido de manera importante en los últimos cuarenta años. Adicionalmente, resaltar que el número de áreas protegidas por país, aunque ha aumentado en los últimos años, es heterogéneo entre países, con países como Paraguay con un porcentaje de áreas protegidas menor al 5% o Dominica con 0% de áreas protegidas, mientras que República Dominicana cuenta con 81,45% de áreas protegidas de acuerdo con Key Biodiversity Areas.
